miércoles, 4 de noviembre de 2015

El Mensaje Reencontrado LIBRO XXXVII


LIBRO XXXVII

La multitud de los hombres se vuelve
útil; sólo yo soy inepto, parecido a un
paria. Sólo yo soy diferente de los demás
hombres, porque venero a la Madre
nutricia.
LAO TSE

El pan de Dios es el que desciende del
cielo y da la vida al mundo.
JESÚS

ÉTUVE RIEN 
EL COMIENZO
1. Aquel que estudia el Libro está
prometido a la vida, sea cual sea su
apariencia en el mundo.
1'. Aquel que rechaza el Libro está
prometido a la muerte, sea cual sea su
seguridad en el mundo.
2. Cuando nos acerquemos al Señor y a su
santa verdad de vida, seremos vueltos del
revés y sacudidos como sacos, y todo
nuestro saber y toda nuestra pretensión
caerán en la nada.
2'. Pues la plenitud de la revelación divina
exige nuestra pobreza total y nuestra
entera libertad de espíritu y de corazón.

2". El espíritu rebelde y los que le siguen
prefieren permanecer en la muerte y
perecer, antes que someterse obedeciendo
al amor. ¿Tendremos éxito donde el Señor
ha fracasado? Y ¿permaneceremos allí de
donde él se ha retirado?

3. La sabiduría del mundo es un juego del
espíritu del hombre.
3'. La sabiduría de Dios es un juego de los
elementos naturales.
4. Cuando comencemos la búsqueda de
Dios, seremos imprudentes y estaremos
expuestos como pájaros. Cuando
terminemos la búsqueda de Dios, seremos
prudentes y estaremos ocultos como
serpientes.
4'. Hay una solución a todo para el que
tiene el valor de esperar, pues todo lo que
se deshace por un lado se rehace también
por el otro, mediante la paciencia de los
actos de la fe.
5. ¡Oh, sacerdotes del Señor encarnado!,
¡oh, fieles de la Madre bienamada!, venid
al Libro de la renovación que os hará
penetrar en las profundidades y que os
conducirá a las alturas de vuestras
religiones, donde brilla la única luz del
Único Amor.
5'. Os proponemos locamente la gracia y
el amor de Dios, y sembramos sin medida
su verdad y su perdón. ¿No os levantaréis
como un santo maná engendrado por
Dios? Y ¿no llenaréis sus brazos tendidos
hacia vosotros?
6. El Señor nos colmará en nuestra
soledad y arrastraremos a los pueblos
en nuestro surco hasta su gloria
resplandeciente y perfecta, a fin de que
sean puestos en sus manos los que le
pertenecen desde toda la eternidad: los
amados de su corazón que vienen a él en
sus corazones.
6'. ¡Oh, Dios mío!, yo soy un pobre
miserable, ignorante y débil entre todos, y
tú me colmas más allá de todo límite; esta
es tu manera maravillosa de burlarte y
reírte de mí, que lloro tanto y tanto por tu
belleza y tu bondad sepultadas en el
corazón de mis hermanos exiliados.
7. ¡Oh, amigos!, el Señor está oculto en
vosotros, y espera de la fe de vuestra
inteligencia y de la buena voluntad de
vuestro amor que le dejéis llegar a ser el
compañero todopoderoso que libera de las
manos de la muerte. ¿No os dejaréis
infantar en la vida, por las manos muy
expertas del Único?
7'. Preferimos permanecer desconocidos
por los hombres sobre la tierra y ser
reconocidos por el Señor en el cielo, pues
la gloria del mundo es un humo que se
dispersa en las tinieblas, mientras que la
gloria de Dios es un humo que se
condensa en la luz.
¿Quién sabe esto ahora?
8. Los poderosos del mundo no aceptan
nuestro trabajo y rechazan el Libro,
creyendo desanimarnos dejándonos
perecer; pero el Señor nos colma en
secreto de su arte y de su amor, y henos
aquí más rico que los más ricos, y he aquí
a esos mismos ricos más despojados que
los más miserables.
¡Oh, milagro del don que no se agota!
8'. ¡Oh, mi Señor!, tu alegría me invade
como un dique que se rompe, y heme aquí
barrido, andando sobre la cabeza, con toda
mi razón hundida y titubeando como un
borracho, con gran escándalo de los
bienpensantes que me miran con
desprecio.
¡Y los dos nos reímos sin ni siquiera
poder decir una palabra!
«Un día negaremos, por todos los bienes
del mundo, lo que ahora ofrecemos
gratuitamente».
9. Henos aquí enfermos, envejeciendo
e inclinándonos cada vez más hacia
la tumba, pero nuestra alma espera
locamente tu socorro y tu favor, ¡oh,
Magnánimo que distribuyes el oro de la
vida a tus bienamados!
9'. ¡Tú, el Impecable y el Perfecto,
devuélvenos la salud, la juventud y la
inmunidad de nuestros cuerpos, a fin de
que, revestidos de tu gloria, te alabemos
santamente en tu eternidad!
10. Tu humor no es tan cruel, Señor de
justicia, pues los corazones de los hombres
están cerrados a causa de su buena
voluntad en explicar y organizar el mundo
sin tu amor, sin tu obra, sin ti, y la ceniza
de las ruinas recubre su inteligencia y se
traga su coraje sin que se cansen de
ignorarte.
10'. Señor del amor loco, te das sin medida
y debemos callar y esperar tu gran juicio
como impotentes y como pobres, llevando
tu secreto que nos colma más allá de toda
expresión. Y ya resplandecemos de tu luz,
pero las tinieblas no lo ven.
11. Volvámonos ciegos, sordos, mudos y
paralíticos a fin de que el Señor de vida
que dormita en nosotros entre en
su dominio y seamos hechos videntes,
oyentes, parlantes y obrantes en él, por él
y para él, sin ocuparnos del mundo ciego,
sordo, aullador y agitado.
11'. El que conoce, posee y toca la verdad
de Dios, ya no tiene sistemas, recetas,
explicaciones ni organizaciones que
proponer a nadie, pues el conocimiento
posesivo del amor divino libera a quien lo
alcanza, más allá de todo límite conocido
o desconocido.
12. No hemos esperado y buscado
discípulos, ni comunidades, ni iglesias,
pues hemos permanecido vuelto hacia
Dios todo el tiempo de nuestra búsqueda,
y si los discípulos vienen, si las
comunidades aparecen y si las iglesias
enjambran, es porque nos borramos cada
vez más ante el Señor que viene
resplandeciente de la salvación de Dios.
12'. Así, nuestra ofrenda será cada vez más
agradable a Dios, pues se acrecentará
constantemente con las almas de los
creyentes que esperan su luz de vida y que
encarnan su corazón inagotable y bueno;
pues sólo Dios es quien se humaniza en
nosotros y nos diviniza en él por su gracia
y por su amor.
13. Los que ignoran al servidor de Dios,
los que le olvidan y los que reniegan de él
son excluidos del consejo de Dios y de su
salvación.
13'. Estos caen en el abismo, pues cortan
estúpidamente el vínculo que les une al
cielo de eternidad.
14. La comunidad de los hijos de Dios está
en cada hogar sometido a Dios.
14'. Y cada hogar santo está en la
comunidad del Señor Dios.
15. Rezaremos así para la comida:
«Gracias Señor, que te entregas para
nuestro alimento bajo el velo tenebroso
de las criaturas terrestres. Haz que
la digestión se realice en nosotros
perfectamente, a fin de que recibamos tu
vida preciosa y que rechacemos el veneno
de la muerte».
15'. Rezaremos así para la comunión:
«Gracias Señor, que te das a nosotros
para nuestra salvación, bajo el velo
luminoso de la criatura celeste. Haz que tu
vida gloriosa resplandezca en nosotros
para siempre, después de haber aniquilado
la abominación del pecado de muerte que
nos mantiene en la agonía del exilio».
16. Si no me conoces cuando soy
voluble...
16'. no me encontrarás cuando soy Sabio.

17. Somos ignorante ante los sabios triunfantes.
Estamos extraviado ante los imbéciles triunfantes.
Somos inútil ante los trabajadores triunfantes.
Estamos loco ante los razonables triunfantes.
Somos miserable ante los ricos triunfantes.
Somos réprobo ante los bienpensantes triunfantes.
Estamos perdido ante los tranquilizados triunfantes.
Somos despreciable ante los poderosos triunfantes.
Somos oscuro ante los inteligentes triunfantes.
Estamos sepultado ante los agitados triunfantes.
Estamos avergonzado ante los hipócritas triunfantes.
Somos estúpido ante los iluminados triunfantes.
Somos incapaz ante los mañosos triunfantes.
Somos mudo ante los discursistas triunfantes.
Somos idiota ante los astutos triunfantes.
Somos cobarde ante los héroes triunfantes.
Somos desertor ante los enrolados triunfantes.
Estamos desplazado ante el mundo triunfante.
¿Es quizá también porque somos verídico y saludable ante los
hijos de Dios triunfante?

18. Seremos tratados como parásitos en
nuestras propias familias, y sufriremos los
reproches de los razonables a causa de
nuestra búsqueda del Señor de vida.
18'. Si somos despreciados, desanimados y
vejados en nuestra santa búsqueda, ¿no es
la marca de Satán que nos aparta de la vía
de la salvación?

18". Nos apartaremos de los insensatos
que sólo tienen desánimos, reproches y
sarcasmos que oponer a nuestra búsqueda
de la salvación de Dios, y les dejaremos en
manos de Satán, al que han escogido por
consejero y por maestro, pues el absurdo
mismo de su condición no les revela el
estado lamentable en el que agonizan sin
esperanza.

19. Todo lo que hacemos para el mundo
no nos da ningún derecho sobre el mundo,
pero aumenta nuestros deberes y nuestras
cargas para con él.
19'. Todo lo que hacemos para Dios nos
somete toda su creación y nos vuelve
libres en ella.
20. Todos hemos caído sobre un montón
de inmundicias donde los brutos acampan,
y que los más inteligentes intentan
organizar vanamente.
20'. Los santos nos proponen la paciencia
y el desapego en vista de nuestra
liberación futura. Sólo los Sabios nos
enseñan a separar la vida de la muerte a
fin de revivir en la libertad de los hijos de
Dios.
21. Los hombres ignorantes de Dios nos
proponen recetas miríficas para aderezar la
basura donde agonizamos. Pero,
desgraciadamente, la basura permanece
como es, y su olor es insoportable y su
sabor es mortal, a pesar de todos los
sistemas con los cuales la recubren
hábilmente.
21'. El Señor Dios ha trazado una vía
misteriosa y muy evidente, a fin de que
todos podamos salir del barro donde
hemos caído por desobediencia a su santo
mandamiento. Él la revela a sus hijos
arrepentidos que hacen su voluntad y
realizan su obra.
22. Si el Señor se retira de nosotros y si
desvariamos en nuestras visiones y en
nuestras palabras como los sordos y como
los ciegos del mundo profano, nos
retiraremos en el silencio y nos
convertiremos en alumnos de los sordos y
de los ciegos, que nos enseñarán la
humildad y la prudencia por su ignorancia
y por su temeridad.
22'. Y si el Señor nos visita nuevamente,
permaneceremos silenciosos y secretos a
fin de no exponernos a ser desmentidos
públicamente por acontecimientos
diferidos. Y si el Señor nos empuja a
profetizar en el mundo, resistiremos hasta
el límite de nuestras fuerzas a fin de estar
muy seguros de que es él quien habla en
nosotros, y nosotros mismos quienes
hablamos en él.
23. Evitaremos todo alimento que se
corrompe violentamente con infección,
todo lo que es fabricado y falsificado por
los hombres, y todo lo que se nos resiste
porque no se ofrece por sí mismo. Así, no
aumentaremos estúpidamente en nosotros
y fuera de nosotros la pesada carga de la
muerte.
23'. Buscaremos todo alimento que se
conserva naturalmente sin pudrirse, todo
lo que es directo y natural, y todo lo que se
ofrece por sí mismo, que venga de la tierra
y del cielo, a fin de aumentar en nosotros
el buen olor de vida que no perece. Así,
prepararemos inteligentemente el día de la
resurrección.
24. Eléonore viene muy pequeña al Libro,
pero el Libro la hará muy grande. ¿No la
cubrirá el Señor con su perfume exquisito?
Ella oye y ve.
24'. Ser hijo de Dios es un maravilloso
estado, pero ¿quién puede mantenerse en
él aquí abajo sin desfallecer ni fallar?
25. Nuestro paso aquí abajo no habrá sido
inútil si hemos conseguido volver a dar a
los humanos, exiliados en la agonía de
este mundo, la esperanza de la salvación
de Dios y el gusto por su búsqueda
inmediata.
25'. El Señor en persona testimoniará
por nosotros el día del gran juicio, y
confirmará nuestra empresa filial; y sus
supervivientes nos alabarán por nuestra
obra fraternal.
26. Hemos hecho hincapié en la muerte
que tiene al mundo entre sus garras ciegas,
pero también hemos puesto el dedo sobre
la vida que se renueva constantemente a
través de ella.
26'. Hemos hecho recordar la cerradura
terrestre y la llave celeste que abren la
puerta de la estancia de la vida
bienaventurada, donde los hijos de Dios se
regocijan de la alegría del Único
Esplendor por la eternidad.

26". Así, hemos perdido deliberadamente
nuestra vida en este mundo mezclado a fin
de salvarla en el reino de Dios.


27. Los sencillos conservan su religión, en espera de ser salvados
milagrosamente.
Los astutos se burlan de su religión, en espera de ser ridiculizados por sus
propios sistemas.
*
Los mediocres desecan su religión, en espera de volver al polvo.
Los rebeldes combaten su religión, en espera de ser destruidos por su propia
rebelión.
*
Los bienpensantes halagan su religión, en espera de ser alabados por ella.
Los incrédulos desprecian su religión, en espera de negarse a sí mismos.
*
Los hábiles adornan su religión, en espera de ser aplastados por el peso de sus
complicaciones.
Los hipócritas corrompen su religión, en espera de pudrirse en el infierno.
*
Los fieles mantienen su religión, en espera de ser sostenidos por ella.
Los infieles abandonan su religión, en espera de ser abandonados por las que
ellos mismos se hacen.
*
Los sabios suprimen su religión, en espera de ser pulverizados por su ciencia
profana.
Los inteligentes explican su religión, en espera de ser desmentidos por el
absurdo.
*
Los laicos olvidan su religión, en espera de perderse en el mundo.
Los clérigos se instalan en su religión, en espera de ser establecidos en el cielo.
*
Los santos viven su religión, en espera de saborear su jugo espiritual.
Los Sabios escarban en su religión, en espera de encontrar su substancia
corporal.
*

28. El Señor nos perdona y nos hace ver
su salvación a pesar de nuestro extravío y
de nuestros crímenes.
¿Qué perdón y qué salvación propone
así el Señor a los hombres extraviados en
la muerte?
28'. Cada extraviado y cada criminal
puede esperar obtener el perdón y la
salvación del Señor, si se lo pide sincera
y tenazmente. ¿Qué esperanza y qué
consuelo proponemos, así pues, a nuestros
hermanos humanos?

29. Desgraciadamente, el caos de la
muerte no es una ilusión.
Desgraciadamente, el espíritu rebelde no
es una ilusión.
Desgraciadamente, el pecado mortal no
es una ilusión.
Desgraciadamente, el mal que nos habita
no es una ilusión.
Desgraciadamente, la agonía del mundo
caído no es una ilusión.
29'. Afortunadamente, la tierra prometida
no es una ilusión.
Afortunadamente, el Señor de vida no es
una ilusión.
Afortunadamente, la encarnación del
viviente no es una ilusión.
Afortunadamente, el remedio de vida no
es una ilusión.
Afortunadamente, la salvación del
mundo arrepentido no es una ilusión.

30. Habrá un juicio general que retribuirá
a cada uno según su fe y según las obras
de su fe, y todo lo que no resista al fuego
será reducido a cenizas y no contará para
nada así como su autor.
30'. Los que hayan triunfado en las obras
del mundo estarán aterrados y mudos
de estupor, y su sorpresa sólo podrá
equipararse a su desesperación por haberse
equivocado tan groseramente.

30". Los hijos de Dios y sus salvados
serán testigos de la ruina de los astutos y
de su hundimiento final.

31. Buscaremos al Señor de sabiduría con
una paciencia de loco, sin dejarnos distraer
por el mundo caído ni por sus obras vanas.
31'. Entraremos en el corazón de nuestras
Escrituras reveladas a fin de encontrar la
perla oculta, en lugar de flotar sobre ellas
y encallarnos en el mundo profano.
32. Ni los orgullosos ni los delirantes que
se adhieren a las falsas doctrinas del
mundo podrán recibir la inteligencia del
Libro, ni apoderarse de él, ni valerse de él.
32'. ¿Dónde están los negros, dónde están
los blancos, dónde están los amarillos,
dónde están los rojos que han
permanecido simples y creyentes, que
recibirán el reino prometido por el Señor y
entrarán en su herencia santa?
33. Pedimos tres veces perdón a los que
hemos ofendido o perjudicado durante el
tiempo de nuestra locura, y pedimos mil
veces perdón a Dios por nuestras ofensas y
por nuestros crímenes cometidos durante
nuestro extravío.
33'. ¡Oh, milagro del amor divino! Los
bienpensantes niegan tres veces su perdón,
pero el Señor de compasión concede el
suyo a la primera petición, pues está ahí
como un mendigo a la puerta de nuestro
corazón, esperando que consintamos
abrirle.
34. Es un pecador quien habla, un hombre
corriente que busca a Dios en medio de los
inconvenientes del mundo, con un oficio
miserable, sin estímulo y sin ayuda de
nadie.
34'. A fin de que los más aprisionados, los
más abandonados y los más desprovistos
cobren ánimo y no desesperen de llegar al
reino escondido que libera de toda tristeza,
de toda miseria y de todo mal.
35. No intentaremos combatir a nuestros
perseguidores, pues nos hundiríamos con
ellos en el barro hediondo de la muerte.
Los daremos a conocer públicamente, les
rogaremos, les perdonaremos, huiremos de
ellos y los olvidaremos.
35'. Roguemos igualmente a Dios a fin
de que nos libre de sus persecuciones
abriéndonos las puertas del jardín secreto,
donde el odio y la muerte no tienen
acceso, pues allí donde está la vida pura
también está el amor puro.

36. Los que únicamente buscan
organizarse siempre mejor en este mundo
caído olvidan el reino prometido por Dios
y se hunden cada vez más en el exilio de
la agonía y de la dispersión, donde
permanecerán durante la eternidad.
36'. ¿No vemos la vanidad de la buena
voluntad de los hombres y la absurdidad
de sus esfuerzos para organizar este
mundo mezclado de muerte? ¡Ah, si los
creyentes tuvieran la locura de creer
verdaderamente, emplearían su buena
voluntad en rebuscar la salvación de Dios
y el reino del Único estaría muy próximo!
37. Hay una gran liberación en volverse
como un muerto en las manos de Dios.
37'. Pero hay una mucho mayor en
volverse como un vivo en su corazón
resplandeciente.
38. Debemos proclamarlo con fuerza: La
fe sin la esperanza de la salvación de Dios
es vana.
La humildad sin la búsqueda de la
salvación de Dios es vana.
La paciencia sin la práctica de la
salvación de Dios es vana.
Pues acaban en la fosa de la muerte, al
igual que la incredulidad, el orgullo y la
violencia, en este mundo habitado por el
mal que no perdona.
38'. Así pues, no proponemos una
resignación pasiva ante la agonía del
mundo, ni un embrutecimiento bestial ante
la muerte que lo habita, como hacen
ciertos ascetas que han mesurado la
vanidad de las obras humanas, pero que no
saben que la salvación de Dios es el
medicamento celeste que salva de la
muerte y de su séquito de miserias y
desesperos infinitos. ¿No ha dicho el
profeta : «Buscadme y vivid», dejando
hablar a Dios?
39. Todas las etiquetas que los
esterilizadores de vida querrán colocarnos
no añadirán ni suprimirán nada a la
formidable propuesta del Libro, que va
dirigida a todos los humanos dotados por
Dios de la inteligencia necesaria para la
realización de su salvamento aquí abajo.
39'. Desgraciadamente, el juicio ha
empezado y el Libro apenas está naciendo
en el mundo, mientras que los hombres
rehúsan el perdón y la salvación de Dios
que les es propuesta en las Escrituras
santas, mientras que se apartan de sus
religiones reveladas, donde no ven más
que supersticiones y morales muertas.

39". Mientras, el mundo camufla cada vez
más hipócritamente la desgracia y la
muerte, sin que nadie nos libere de ellas
verdaderamente.

40. Busquemos asiduamente al Señor de
vida mientras todavía estamos a tiempo,
pues cuando topemos con el absurdo, será
demasiado tarde. Y a pesar de nuestros
disfraces, sólo encontraremos la falsa
puerta de la embriaguez, el muro del
desespero o el abismo de la locura.
40'. Cuando la desgracia y la muerte
caigan sobre nosotros, las buenas palabras
y el auxilio de los nuestros nos parecerán
vacíos e inútiles, pues nuestra soledad será
tal que nuestros propios pensamientos y
nuestras propias obras nos parecerán
insensatos y vanos.
41. La inspiración sin la acción es
impotente y la acción sin la inspiración es
ciega. Ambas reunidas constituyen la
perfección de la obra humana.
41'. El arte sin la naturaleza es impotente y
la naturaleza sin el arte es ciega.
Ambos reunidos constituyen la
perfección de la obra divina.
42. El castigo de los malvados será ver
que sus maldades han servido para la
salvación de los creyentes sin que se den
cuenta y que no se han perjudicado más
que a sí mismos.
42'. La recompensa de los hijos de Dios
será ver que sus auxilios han servido tanto
para su propia salvación como para la
de los que ayudaban sin esperanza de
recompensa.
43. Un versículo del Libro iluminará al
verdadero hijo de Dios, mientras que todo
el Libro cegará a los hijos del mundo
profano. Es la justicia de Dios que hace
que cada cual se juzgue a sí mismo sin
saberlo.
43'. Una palabra, un gesto, instruyen al
que alberga en sí el Espíritu de Dios,
mientras que toda la creación no enseña
nada a aquellos que cuentan con su propia
inteligencia. ¡Se ridiculizan ellos mismos
y no lo saben!
44. Los optimistas triunfantes que quieren
organizar el mundo negando la desgracia y
la muerte que lo habitan nos dan
escalofríos, pues se han puesto a correr
para llegar más de prisa a la fosa de donde
no se vuelve, y la multitud de los ciegos
los aclama y les sigue, cantando un himno
de victoria que cubre la voz de los profetas
enviados por Dios.
44'. Somos pesimista cuando volvemos a
recordar la vanidad de los esfuerzos de los
hombres para organizarse y para salvarse
en este mundo caído, pero somos
optimista volviendo a recordar la
salvación de Dios prometida a los
hombres sencillos y creyentes.
Desgraciadamente, ¿cuántos creen aún en
el salvamento espiritual y corporal del
hombre exiliado aquí abajo, si ya nadie
cree ni siquiera en la caída antigua?
45. «¿A qué se juega hoy en día en el
mundo?», preguntan los profanos curiosos
del vacío. Y los verdaderos creyentes
responden: «No lo sabemos, pues la
búsqueda de la salvación de Dios nos
impide ocuparnos de saber a qué juega el
mundo actualmente».
45'. Los que descuidan la búsqueda de la
salvación de Dios cometen un crimen
contra ellos mismos; pero los que
persiguen a los buscadores de la salvación
de Dios cometen un crimen contra todos.
¿Acaso no está también aquí el pecado que
no será perdonado? Y ¿no son éstos
también los malditos que serán arrojados a
las tinieblas exteriores?
46. ¡Oh, mujeres obtusas e ignorantes,
tened mucho cuidado con no oponeros a
la búsqueda de la salvación de Dios en
nombre de vuestras pequeñas razones
profanas, que prolongan vuestra agonía en
este mundo, pero que no os liberan de ella!
46'. ¡Oh, mujeres razonables y ciegas, no
os opongáis estúpidamente a la santa
búsqueda de vuestros compañeros, pues
seríais excluidas de la salvación de Dios
desde este mundo, y vuestro castigo sería
irremediable! Ayudadles, más bien, con
amor, a fin de participar en su recompensa
y en su salvamento.
47. Todo nos sirve si servimos a Dios y a
su creación rectamente.
47'. La luz aparecerá como un punto en las
tinieblas y crecerá hasta el día de Dios.
48. Hay que decirlo y repetirlo: la
revelación más auténtica, la más precisa y
la más realizada del misterio de vida y de
la salvación de Dios se encuentra en los
libros conocidos de los profetas de Dios y
en los libros desconocidos de los Sabios
de Dios. ¿No es nuestra religión un
símbolo vivo del misterio oculto en todos
los tiempos? ¿Es que ya no lo vemos? ¿Es
que ya no lo oímos?
48'. El Señor de vida bien se ha encarnado
una vez universalmente para la salvación
de todos, y también volverá una vez
universalmente para el juicio de todos;
pero debemos saber ahora que ha
venido desde el comienzo, que viene
presentemente y que aún vendrá en
particular para la salvación de algunos.
49. Es una nueva e inmensa revelación la
que hacemos aquí, a fin de que cada
creyente cobre ánimo y emprenda
audazmente la búsqueda de la salvación de
Dios, siempre presente y siempre posible
en este mundo.
49'. Desgraciadamente, también aquí
habrá muchos llamados y pocos elegidos,
pues la mayoría de los creyentes prefiere
permanecer en la nostalgia de la salvación
pasada y en la esperanza de la salvación
por venir, antes que emprender la
búsqueda de la salvación presente.
50. Los incrédulos que intentan forzar el
secreto de Dios y los que tratan de violar
la santa naturaleza, serán destruidos desde
dentro y desde fuera por su propia malicia
y por su propia rebeldía.
50'. Los creyentes que oyen la palabra de
Dios y que la realizan ayudando la santa
naturaleza, serán salvados dentro y fuera
por su propia simplicidad y por su propia
obediencia.
51. Dios ha dado a cada uno la suficiente
inteligencia y la suficiente simplicidad
para que realice fácilmente su propio
salvamento aquí abajo penetrando la
palabra revelada.
51'. Desgraciadamente, muchos desprecian
su parte de inteligencia y se vuelven como
brutos ante la enseñanza del Único.
Muchos también desprecian su parte de
simplicidad y se vuelven como simios
vanidosos ante la palabra de Dios.
52. Roguemos para que la urgencia
aterradora de la búsqueda de la salvación
de Dios se nos vuelva evidente antes
de que sea demasiado tarde para
emprenderla.
52'. Pues el infierno estará hecho de este
pesar y, aún más, de la facilidad pasmosa
de la salvación que nos habrá sido
propuesta vanamente en este mundo.
53. La salvación de Dios es la ciencia más
experimental que pueda haber, pues es la
ciencia del Dios que ha creado el mundo y
los universos que lo rodean, ¡y éste no
delira abstractamente en el vacío!
53'. Volvemos a decir la revelación
enorme por ser increíble: Dios envía su
esencia santísima que se encarna en la
purísima substancia del mundo para la
salvación de toda la creación caída.
Comprenda quien pueda.
Experimente quien quiera.

53". Consideremos la NAVIDAD.
Penetremos la NAVIDAD. Imitemos la
NAVIDAD. Adoremos la NAVIDAD.
Cantemos la NAVIDAD.

54. Sin la bendición de Dios, somos
totalmente impotentes para manifestar
aquí abajo la vida del Señor de
resurrección.
54'. La luz de Dios primero fecundará
nuestras tinieblas interiores, después,
nuestras tinieblas manifestarán la luz de
Dios.
55. Toda la creación de Dios puede
participar en la salvación de Dios por
mediación de los Hijos de Dios. Así,
los animales, los vegetales e incluso los
minerales pueden ser restituidos en la
gloria y en la inmortalidad del Único;
nadie debe ignorarlo ni olvidarlo.
55'. ¿No es por efecto de la gracia del
Todopoderoso que el Libro es dado a los
hombres simples y de buena voluntad en
Dios? Y ¿no es por efecto de su justicia
que el Libro es rechazado y ridiculizado
por los malvados, por los astutos y por los
hipócritas?
56. Alegrémonos de ser varios para
ayudarnos mutuamente en la búsqueda de
la salvación de Dios, pues el que nos la
recuerda ahora ha estado solo para
reencontrar el camino antiguo invadido
por las zarzas de la ignorancia y del
olvido.
56'. Consideremos el estado del que nos
muestra el camino y que nos aparta las
zarzas y las espinas acumuladas por la
negligencia de los guardianes de la vía de
Dios. Consideremos su paso que marca
misteriosamente la ruta que debemos
seguir.
57. Si el mundo nos ignora o nos rechaza,
no luchemos contra el mundo para ser
reconocido o para ser aceptado por él.
Volvámonos más bien hacia el Padre
celeste y hacia la Madre terrestre que nos
colmarán de los bienes muy reales de la
vida.
57'. Así, ignorándonos o apartándonos de
los bienes aparentes de la vida profana, el
mundo nos salva del callejón sin salida de
la muerte y nos orienta hacia los bienes
eternos de la vida sin mezcla, donde el
Señor reposa con sus bienamados.
58. Muchos entre los mismos santos no
han visto ni tocado al Señor encarnado en
este mundo, pero son bienaventurados,
pues han creído sin ver ni palpar y su
recompensa brilla por fin en el cielo.
58'. Muy pocos entre los mismos santos
han visto y tocado al Señor encarnado en
este mundo, pero son bienaventurados,
pues han creído antes de ver y palpar, y su
recompensa ya brilla sobre la tierra.

59. La malicia de los malvados les permite
engañar y robar a los hombres durante
algún tiempo, pero jamás les permitirá
engañar y robar a Dios, ni tan sólo un
segundo. Esto está totalmente asegurado.
59'. La estupidez de los astutos les permite
burlarse de la revelación de la salvación de
Dios y oponerse a ella, pero jamás les
permitirá beneficiarse de ella, ni tan sólo
un segundo. Esto es totalmente cierto.
60. Los impíos y los muertos que
desbordan de energía para negar la
revelación de los Hijos de Dios y para
oponerse obstinadamente a la salvación
de Dios, se derrumban lamentablemente
cuando la desgracia les roza con su ala
oscura y cuando la enfermedad les habita
cierto tiempo.
60'. Toda su fuerza está constituida por la
negación de la vida divina y por el rechazo
de la salvación de Dios que les son
propuestas aquí abajo. Por eso, cuando el
demonio les abandona se convierten en
andrajos, pues la vida divina se ha retirado
de ellos, y quedan como peleles vaciados
de toda substancia, que agonizan
abandonados de todos.
61. Huyamos de la gente siniestra,
apagada, sin entusiasmo y sin ánimo, pues
ciertamente no es de Dios, y no
conseguiremos animarla, mientras que
sabrá muy bien desesperarnos y
arrastrarnos en su agonía ciega y sorda.
61'. Busquemos a nuestros hermanos en la
fe y en la esperanza de la salvación de
Dios, y conversemos con ellos de los
Santos Misterios que justifican nuestra
búsqueda diaria, y alegrémonos juntos de
la enormidad de la promesa de Dios que
justifica nuestra esperanza y nuestro
entusiasmo presentes.
62. Huyamos del mundo y de sus
múltiples cuidados, pues la lucha para
tener el derecho de agonizar en él
miserablemente es demasiado agotadora y
distrae demasiado de la búsqueda de la
salvación de Dios, que es lo único que
importa en verdad.
62'. Retirémonos en la paz y en la soledad
de nuestras santas comunidades, a fin de
poder concentrar toda nuestra atención en
la búsqueda de la salvación de Dios.
Cuando la hayamos encontrado, podremos
volver al mundo, si esto nos conviene.
63. El mundo caído es, en realidad, el
inmundo bajo el cual está oculto el
verdadero mundo que debemos
reencontrar y magnificar en Dios.
63'. Predicamos el cielo terrestre y la tierra
celeste, y no el cielo desencarnado ni la
tierra exiliada, como hacen los extremistas
que separan pero que no saben unir.

63". Deseamos el reino unido,
el reino completo,
el reino de Dios.

64. Una cosa es cierta: si nos creemos más
inteligentes que Dios y si pensamos estar
por encima de sus enviados, estamos
extraviados y perdidos sin remisión en el
exilio de la muerte.
64'. ¿No es nuestro revelador, nuestro
fundador, quien nos propone, con el
permiso de Dios, el medicamento
celeste que es el Salvador encarnado
milagrosamente para la salvación de los
hijos de Dios?

65. Estamos todos perdidos en este mundo
mezclado de muerte, y nuestro final está
inscrito en la inmundicia que nos habita.
65'. Así, perdidos por perdidos, ¿qué
arriesgamos al consagrar nuestra pequeña
prórroga de vida en buscar la salvación de
Dios, que es lo único que puede salvarnos
de la dispersión de la muerte?

65". ¿No es nuestro fundador quien
nos dice estas palabras sorprendentes,
trastornantes, pasmosas: «Todo esto está
presente ante vuestros ojos y al alcance de
vuestras manos, todos los días de vuestra
vida. Velad, pues, para ver y rogad para
conocer, antes de ser engullidos por la
muerte?»

66. Creéis ver lo que somos y os alegráis
de ello por nosotros y por vosotros.
«Si tu no me conoces en mi bajeza...
66'. Pero vemos lo que no somos y nos
entristecemos de ello por vosotros y por
nosotros.
no me encontrarás en mi nobleza».
67. El que contempla a su Señor y le
pide humildemente ayuda en todas las
circunstancias, es más santo que toda la
humanidad que intenta valientemente
reformarse y organizarse en el mundo sin
conseguirlo.
67'. No nos debemos agotar luchando
inútilmente contra nosotros mismos ni
contra el mundo, sino que hemos de
buscar sin tregua a Dios y su salvación,
que nos liberarán de la agonía de la muerte
perpetuamente mantenida aquí abajo.
68. El Libro ha sido escrito bajo la
inspiración del Espíritu. El autor es tan
ignorante y está tan desprovisto al
terminarlo como lo estaba al comenzarlo.
68'. ¿Quizás está todo oscuro?
¿Quizás está todo claro?
¿Quizás está todo claroscuro?
¡Sólo Dios lo sabe!

68". La búsqueda de Dios y de su
salvación es muy larga y decepcionante,
y los hombres prefieren contar
razonablemente con el trabajo de sus
manos para subsistir y para organizarse
aquí abajo.
Pues hay que estar loco para creer en
Dios y en su salvación, y hay que ser
demente para buscarlos en este mundo.
¡Y, sin embargo, aquí están esperándonos!
¿No está todo claramente enseñado en
nuestra sublime y profunda religión
revelada?


¿ Conocen los misterios de la
Naturaleza? Sin embargo, escriben.
CORÁN

Los que conocen la Naturaleza no
intentan expresarla con palabras, y los
que lo intentan, demuestran que no la
conocen.
CHUANG TZU

*

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